viernes, 5 de marzo de 2010

Dinámicas de grupo (y crossover blogger)

Se me ha ido la actualización un par de días pero no he tenido ni tiempo ni ganas de ponerme a escribir algo tan largo. Aprovecho un rato muerto en mi cursito (no me pueden dar tanto tiempo para maquetar un newsletter de cinco páginas, me sobran horas por todas partes) y actualizo con los últimos acontecimientos.

El martes por la mañana me llamaron para acudir a una dinámica de grupo al día siguiente, es decir, el miércoles. Crucé Madrid y allí que me planté, en un estupendo día de lluvia. Llegué a la entrada y no había nadie en la garita de seguridad, así que llamé directamente al telefonillo de la empresa. Me abrieron, pasé y, cuando ya casi había llegado a la puerta del edificio donde estaba la empresa en cuestión, una segurata bajita con fuerte acento eslavo me dice que no puedo entrar sin más. Pues vale, no voy a discutir. Finalmente, me indica por qué puerta tengo que entrar (como si no lo supiera ya) y me deja marchar.

En la dinámica de grupo éramos ocho, todas de género femenino. En la primera parte, el jefe nos preguntaba una por una algo más o menos genérico relacionado con la comunicación o el periodismo, menos a mí, que me preguntó por qué creía que estaba haciendo una dinámica de grupo. Ahí ya se pudieron ver un poquito los perfiles de cada una: la listilla, la trepa, la lerda (en este caso eran dos) y una que se creía por encima de las demás por haber nacido antes y que tenía una idea muy equivocada acerca de lo que es o debería ser el periodismo. Si yo vi todo eso, los que nos estaban haciendo la dinámica de grupo ni te cuento de todo lo que se tuvieron que dar cuenta.

Luego vino la segunda parte (simular una situación dada por el entrevistador), en la que todos los perfiles que se apreciaban sutilmente en la parte de la pregunta individual salieron a flote en todo su esplendor. La que se creía por encima de las demás me acusó de haber estudiado en una universidad privada, con lo que demostró dos cosas:
  1. Intentaba quedar por encima del resto y creyó ver allí una oportunidad.
  2. No conoce las universidades de la Comunidad de Madrid, pese a vivir en ella.
La listilla también intentó opinar sobre algo de lo que no tenía ni puta idea pero dio la casualidad de que yo, que estaba enfrente, sí que tenía idea de ello. Y la trepa empezó a hablar en el ejercicio de grupo de una forma totalmente fuera de lugar con la situación planteada. Se suponía que era una conversación entre amigas que habían quedado para tomar un café después de mucho tiempo sin verse y la señorita empezó con algo así como "Yo considero que los contenidos impartidos en las universidades...". Si habla así con sus amigas, no quiero encontrarme nunca a todas juntas charlando en el metro.

Después me largué a casita y, al darme cuenta de que pasaba por debajo de casa de Hell's Tea, le mandé un mensajillo por si estaba disponible y le apetecía tomarse conmigo un té. Lo habéis adivinado, ésta es la parte del crossover blogger.

El barrio de Hell's Tea está bien comunicado: tiene dos paradas de metro y casi me atropellan tres autobuses desde la salida del suburbano hasta la entrada del portal. También tiene unas pedazo de escaleras de la muerte con las que yo no contaba y que me daban mucho miedito en un día lluvioso, dados mis antecedentes. La alternativa a las escaleras era una enorme rampa serpenteante que más bien parecía un laberinto, sólo le faltaba tener su propia colonia de minotauros. Como soy vaga, decidí arriesgarme y coger las escaleras, a pesar de todo.

El té se alargó, hablando de todo un poco, frikeando con el Photoshop CS4 (somos así de raras, qué se le va a haber) y terminé quedándome a comer con Hell's Tea y su respectivo, cual familia feliz. A las cinco y pico de la tarde me di cuenta de la hora que era y de que tenía que ir a hacerle una visitilla a Ruth por ciertos temas laborales.

Una vez terminé todo, regresé a casa, me quité el disfraz de las entrevistas de trabajo (camisa, zapatos y fular, en vez de camiseta, deportivas y palestino, quién lo diría), me lavé la cara, me duché, me puse mi pijama y me tiré lo poco que quedaba de tarde sin hacer nada.

5 comentarios:

  1. ¿Quién quiere ir al Zoo pudiendo ir a una dinámica de grupo para ver la fauna...

    Eso sí, aún en el caso de haber estudiado en una privada (que sé que no), ¿eso te hace mejor o peor que haber estudiado en una pública? Que venga alguien y me lo explique, por favor...

    En fin, a ver si hay suerte, guapa!!

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  2. Hemos pensado que te vamos a adoptar como hija y así nos ahorramos la discusión de qué nombre ponerte porque ya lo traes de serie. Ahora bien, más vale que te salga el curro de la dinámica de grupo, porque hija sí pero mantenida no.

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  3. Y así pasaste de hacer una dinámica de grupo a una estática individual :D

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  4. @Vicky: en algunas carreras (como periodismo) se tiene una imagen muy mala de las universidades privadas. Es cierto que hay un par de ellas que meten más caña que muchas públicas.

    @Hell's Tea: no os preocupéis, ya tengo otros padres que me mantienen. Además de la discusión por el nombre, os habéis ahorrado la preparación al parto, los pañales, decidir a qué colegio me lleváis, pagarme la carrera, etc. (nNo veas si traigo cosas de serie).

    @Mr.: pues más o menos :P

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  5. Es verdad, el parto. Razón de más para empeñarme en adoptarte.

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